Casa en El Realejo
2015
Memoria

Ante una serie de necesidades recogidas en el programa del proyecto nace esta vivienda entre medianeras en la zona alta del barrio del Realejo, Granada, bajo el imponente hotel Alhambra Palace y sobre la no menos presente iglesia de San Cecilio. La parcela, de forma alargada debido a las sucesivas particiones territoriales a lo largo de los años, se encuentra encajada entre viviendas a ambos lados y el alto muro de mampostería del hotel en su fachada posterior. En consecuencia, el proyecto busca la transversalidad en la configuración de sus espacios.

Para hacer denotar esta partición perpendicular a la dirección clara de la parcela se idea un patio central como elemento principal de la casa, tanto en planta al separar espacios como en sección al unirlos verticalmente. Este patio hace las veces de impluvium de luz, repartiéndola en las distintas alturas. A ambos lados de este patio se articulan los dos tramos de escalera, cuya estructura ligera deja pasar las visuales cruzadas. Tanto el patio como las escaleras se adaptan a las forma irregular de la partcela, jugando con sus anchos para recalcar el quiebre del solar y haciendo de este un carácter propio del proyecto.

Los espacios que dan al patio se relacionan con este de forma directa. En los puntos en los que da a un espacio público el elemento separador es vidrio transparente. Sin embargo, los tres aseos (uno por planta y en contacto con el patio) están delimitados por un vidrio translúcido. A parte de iluminar cada uno de los espacios adyacentes permite un punto abierto intermedio en la vivienda, favoreciendo así la ventilación cruzada.

En planta baja este patio se abre hacia el interior, dando la bienvenida al visitante aportando luz al recibidor. Esta ampliación introduce a su vez iluminación al taller y al garaje. Las habitaciones de los hijos, al fondo, se comunican mediante un patio a misma cota accesible únicamente desde sus habitaciones.

En la planta intermedia, la cocina se dispone paralela a la línea de fachada trasera fomentando la transversalidad, al igual que la mesa del comedor. El salón se organiza alrededor de la chimenea, la cual actúa como eje visual al entrar en la estancia. La pared opuesta está ocupada por la colección de vinilos del cliente, organizados en cajones de cristal que permiten la visión de estos.

La planta superior, al igual que el resto de la casa, se divide en dos. La parte delante se resera para la habitación de matrimonio, con baño y vestidor. Como elemento permeable entre la habitación y la escalera se disponen unas lamas verticales de madera que dan cierta privacidad pero permiten el paso de la luz y comunican visualmente con el estudio de la pareja. Este se encuentra en la parte posterior junto con la amplia biblioteca del cliente. Se dispone una gran mesa alargada en la que ambos pueden trabajar a la vez si lo desean y que no entorpece la visión del patio trasero.